Presentación
Prólogo
PRIMERA PARTE: PREPARACIÓN DEL ARGUMENTO
1. La Iglesia debe institucionalizar el ministerio de la mujer
SEGUNDA PARTE: EL ARGUMENTO
1. Hombres y mujeres son ontológicamente iguales
2. La Iglesia ha expresado los motivos por los que la mujer, a pesar de ser ontológicamente igual al hombre, no puede ser ordenada al presbiterado
3. El dictamen de que las mujeres no pueden ser ordenadas sacerdotes no es aplicable a la cuestión de si estas pueden ser ordenadas diáconos
4. Las mujeres han sido y son llamadas al diaconado
5. Existen argumentos de mayor peso en la Biblia, la historia, la tradición y la teología a favor de que las mujeres puedan ser ordenadas diáconos que de lo contrario
6. Las mujeres han servido a la Iglesia en el ministerio diaconal de manera constante, con independencia de haber sido ordenadas o no para desempeñar dicho servicio
7. El ministerio ordenado de servicio desempeñado por las mujeres es necesario para la Iglesia, esto es, tanto para el pueblo de Dios como para la jerarquía
TERCERA PARTE: CONCLUSIONES
1. La ordenación de la mujer al diaconado es posible